El Masaje Restaurador Corporal es un método terapéutico especializado que se engloba en el Sistema ARC y que permite corregir las disfunciones de nuestros músculos y articulaciones para recuperar, de este modo, la morfología original de la persona. El Masaje Restaurador Corporal no solo elimina síntomas como el dolor o la falta de movilidad, sino que también hace posible localizar la raíz del problema para evitar que las lesiones se cronifiquen.
Colocando al paciente en posturas precisas que propician un estiramiento global de las cadenas musculares que recorren su espalda, piernas y brazos, el terapeuta realiza manipulaciones de la musculatura y de sus fascias. Su trabajo, efectivo y respetuoso, se adapta al ritmo y a las emociones del paciente, sin forzar su cuerpo y permitiendo que exprese todas las sensaciones y reacciones que surjan a lo largo de la sesión.
El Masaje Restaurador Corporal necesita la participación activa del paciente. Su atención, sus movimientos, su postura y su respiración, son imprescindibles para un resultado óptimo. Gracias a la colaboración entre terapeuta y paciente, este método permite desbloquear estructuras corporales internas, eliminar disfunciones muy arraigadas, reequilibrar la energía del organismo e iniciar un camino de retorno hacia las formas originales de nuestro cuerpo.
Cuando las lesiones se agudizan o ante la presencia de una excesiva rigidez y tensión, el Masaje Restaurador Corporal reduce y elimina los síntomas de: